viernes, 22 mayo 2015. Hay que limpiar la casa porque, al parecer, alguien va a dar una fiesta. La casa es la casa de mis padres, pero cuando me asomo a la terraza lo que veo es la calle y el río de mi antigua casa. Cuando paso la escoba por los rodapiés, se convierten en masas de pelusa gris. Empiezo a agobiarme porque la casa no acaba de parecer limpia. También pienso que a mi padre no le hará ninguna gracia que vaya a haber una fiesta.