lunes, 23 agosto 2021. Un niño se pega a mi espalda. Dame la cartera, dice. Me hace gracia, me río. No ves que no lleno ni bolso, le digo. El niño se enfada muchísimo, me cachea desde atrás, ve que no llevo nada en los bolsillos. Comienzo a andar con el niño pegado. En una tienda veo a Marina, una amiga de mi tía. Me enseña un vestido de princesa Disney. Le entiendo por los gestos que le podría gustar a mi sobrina Nadia. Asiento y sigo caminando. El niño pegado a la espalda me da calor, me cansa. Doy un salto, se despega y cae al suelo, pero en el suelo no es más que una ganzúa. La ganzúa habla: Tengo una pistola, no te librarás de mí.