en batín

jueves, 20 febrero 2025. Juano llega a casa (no se parece a mi casa; se parece más a la casa de mi abuela). Dice que me regaló sin querer un pijama que había comprado para su tío. Alberto trae el pijama. Todavía está envuelto (en papel de seda arrugado). Lo rasga por un extremo para comprobar que es el pijama que busca. Es un pijama rojo de señora con motivos orientales (se parece al último pijama que mi hermana le compró a mi madre). Sí, este es. En ese momento aparecen varias vecinas con sus carritos de la compra (una de ellas va dentro del carrito). Saludan y miran a Juano con recelo. De repente me doy cuenta de que Alberto, Juano y yo vamos en batín. Ellos tienen un pase, pero yo llevo el batín de mi suegro y, para más inri, un gorro de lana muy viejo calado hasta las cejas.