futuro

sábado, 17 junio 2017. Llego a casa. Noto el ascensor distinto. Pienso que es igual que hace unos años. La puerta de casa también h cambiado, la llave no entra. Llamo con los nudillos. Abre mi suegra, parece muy contenta de verme. Tenía muchas ganas de volver a verte, estaba preparando la cena, ¿te quedas?, dice. Sobre la encimera hay lechugas muy verdes. Me enseña unos filetes de pollo relucientes. He viajado en el tiempo, pienso. Me miro al espejo, estoy igual, no comprendo que no note que tengo 30 años más. A ella, sin embargo, se la ve joven y ágil, con el pelo rubio recogido en un moño italiano. No sé qué hacer, si quedarme a esperar a Alberto que tendrá 17 años o marcharme con cualquier excusa. Pero, ¿marcharme dónde, si esa casa es mi futura casa?