iris

miércoles, 13 enero 2021. Mi cuñada dice que tiene una cita a ciegas pero no piensa ir. Me da pena que esa persona se quede allí, esperando. Ve tú, total, no sabe cómo soy, dice. No sé qué hacer porque las citas a ciegas me parecen un horror. Mientras me lo pienso, veo en el espejo que me he transformado en otra persona: soy rubia y tengo los ojos claros. Me parezco mucho a mi cuñada. Pienso que quizá ella ahora se parezca a mí. La busco, pero no está en casa. Tengo que ponerme las gotas de la tensión ocular y no sé qué hacer. Las gotas oscurecen el iris. Me preocupa que cuando volvamos a intercambiarnos, los ojos de mi cuñada hayan cambiado de color.