viernes, 13 diciembre 2019. Salgo a toda prisa de la casa de mis padres. Mi prima Elisa me ofrece unos restos de pizza. Dudo si llevarme uno para comerlo en el ascensor, pero son demasiado grandes y no quiero ir comiendo por la calle. Al entrar en el ascensor noto que hace un ruido raro. Verás que me va a pasar con en otros sueños, pienso, que el ascensor no deja de bajar. Efectivamente, empieza a coger velocidad. Intento concentrarme para cuando pase por el bajo, dar un fuerte empujón a la puerta. Nada, no tengo fuerza en los brazos y es ascensor sigue bajando. Miro el lugar donde deberían estar los botones y no hay nada.