viernes, 10 enero 2020. Camino por la calle con una mochila y una bandera del Atlético de Bilbao a modo de capa. Por todos los bares que paso veo gente con polos azules y la banderita de España en el borde de las mangas y el cuello. Estoy muy cansada. Me siento en una de las terrazas, aunque todo el mundo me mira mal. Una señora se sienta en la mesa de al lado y pide "Cerdito con Coca-Cola". Me suena fatal pero, para no llamar la atención, pido lo mismo.