collar de arroz

martes, 5 julio 2022. Estamos durmiendo. Se supone que es nuestra casa pero tiene una distribución distinta. A la izquierda hay una puerta de cristal. Puedo ver cómo alguien se mueve por la casa mientras fuma. El humo llega al dormitorio. Veo las sombras de una pareja que sale de casa con maletas. Después sale otro tipo desaliñado. Le digo a Alberto que tenemos que irnos, que pueden volver. Al sacar el coche del garaje vemos a dos parejas que pelean a tiros desde una acera a otra. Seguimos nuestro camino y acabamos en una especie de cantera circular sin salida. De repente estamos otra vez en casa. Noto movimiento dentro, me asomo desde la terraza por una claraboya y pregunto, ¿amigo o enemigo? Amigo. Es Alberto metiendo ropa en una maleta. ¿Vas a llevar el equipito rojo o el equipito azul?, dice. Los dos, por si acaso. Cuando me miro, veo que voy vestida de mamarracho, parece que vaya disfrazada. + Estoy haciendo un collar en un patio. Isabel María dice que quiere entrevistarme y mientras hablo debo seguir haciendo el collar hasta que mida como mínimo 50 centímetros. Le digo que eso son muchos granos de arroz (el collar lo hago con granos de arroz, minas de lápiz y piedras rectangulares de pizarra). Isabel María se aleja y se me te en la cama. La veo darme instrucciones a lo lejos. También veo a Alberto metiendo al hijo de Isabel María en su cuna. Por una especie de altavoz que hay en la mesa comienzan las preguntas. No las entiendo, son muy enrevesadas, respondo lo que me parece. Mientras, voy ensartando granos de arroz y piedras en un hilo. Violeta me ayuda. Dice que nadie como ella sabe ensartar minas de lápiz.