quesito

jueves, 25 septiembre 2014. Salgo de la casa de la abuela de Odila (y que ya no existe) comiéndome un quesito. En los escalones de la puerta hay varios hombres armados. Llevan turbantes. Mientras me alejo de ellos me como el quesito de manera que lo vean, como si ese quesito fuera mi salvoconducto.