martes, 14 septiembre 2010. Atravieso a todo correr y en diagonal un descampado de tierra a pesar de llevar unos tacones altísimos. Cuando llego al final intento subir la alambrada que lo rodea para recoger ropa tendida que hay en lo más alto. Cuando estoy trepando veo llegar al Fari con un niño de la mano. Me bajo porque la falda es muy corta y temo que me vea las bragas. Cuando vuelvo, de nuevo a todo correr, sobre la mesa está toda la ropa recogida sobre una mesa enorme.