martes, 17 agosto 2010. Llego a La casa del libro y toco el hombro de Manuel. Pienso que me dará un abrazo enorme, pero apenas me saluda. Me pide que lo acompañe. Quiere que le haga una foto debajo de un arco que han montado para la feria. Le hago varias fotos, algunas con flash por si no hay suficiente luz. Como no me has avisado con tiempo no te he puesto en la lista de invitados, dice. Supongo que habla de la boda de Miriam. No pensaba ir de todos modos porque no la conozco, le digo. Pienso que no se ha alegrado de verme y me da mucha pena. Aunque ya no me quieras voy a seguir llamándote El hombre cangrejo, le digo.