viernes, 31 diciembre 2010. Alberto y yo subimos en bus por la calle Victoria. Nos bajamos frente a San Lázaro. Se supone que vamos al cine Zayla. Nos cruzamos con Camilo. Va del brazo de una chica muy guapa. Del hombro derecho cuelga el bolso de ella. Qué casualidad, pienso, el bolso verde que ayer mismo vi en Hakei. Pienso que debe de estar muy enamorado para llevarle al bolso a su novia. Cuando nos acercamos al cine, le digo a Alberto que se dé prisa, porque todos los que iban en el bus con nosotros se nos han adelantado y están formando una cola. Eso es imposible, sería mucha casualidad, dice.