sábado, 9 septiembre 2017. Camilo nos lleva a su casa. Es un loft con ventanales enormes. Nos sirve algo en cuencos. No sé qué es pero está muy bueno. De fondo, una música suave y relajante. Me fijo en algunas fotos. No me cuadra que sea su casa. Como si me hubiera leído el pensamiento, me dice: La casa no es mía, es de Julio de la Rosa. Pienso que en realidad es de una chica, por los adornos. La casa comienza a llenarse de gente. Me doy cuenta de que tengo tinte en el pelo y debería quitármelo. Me voy a la peluquería, les digo poniéndome una rebeca verde enorme que no parece mía. Ya en el ascensor, pienso que podría haberme quitado el tinte en la ducha.
En la calle están rodando una película sobre el 15-M. Errejón es uno de los entrevistados. No sé si sólo están ensayando porque sólo dice a cámara: Bla bla bla bla bla. Le han pegado barba postiza. Una chica le dice a Nancho Novo: Aquí, quien encuentra a alguien que no está amargado, compra. Novo la besa. Primer plano. Después ruedan como choca una furgoneta contra una farola. ¡Corten!, grita alguien y todos se levantan y aplauden.