domingo, 3 diciembre 2010. Carlos y yo estamos tirados en el suelo. Él juega con su móvil y yo apunto títulos de canciones en un trozo de cartón. Miro la habilidad de sus dedos sobre las teclas diminutas y la comparo con mi letra apretada sobre el cartón. Pienso que ahí están los 32 años que nos separan. Apúntame todas las que tengas de Neil Young, dice sin dejar de mirar la pantalla del móvil.