ladrar

jueves, 8 febrero 2024. Elisa y Andrés llegan a casa con muchas cajas. Nadia, su hija, los ayuda. A Elisa se le abre la blusa y veo que se ha tatuado todo el cuerpo. No le digo nada. Andrés desembala una tele enorme. No sé cómo preguntarles si se piensa quedar a vivir en casa. Nadia, como si me leyera mis pensamientos, me dice: no te preocupes por nosotros, hacemos poco ruido, el único problema es que cuando nos peleamos ladramos tres veces.