pereda

martes, 4 abril 2017. Me invitan a leer poemas. En el escenario hay una mesa con un mantón y sillas verdes colocadas como para cantar flamenco. Una señora me dice que se ha animado a tener mail y le abra uno. Su portátil es blanco y se transforma en una folio doblado. Me siento en un lateral, en una especie de pupitre pequeño. Una chica me dice que tengo que leer poemas sobre el tiempo, los pájaros y Pereda. Le pregunto si tienen algún libro mío. No, improvisa. El público comienza a pelear entre ellos. Discuten sobre la fecha en que apareció Internet. Intento hacerlos callar. ¡Internet llegó a mi casa el 13 de abril de 1997!, les grito. Un chico asiente, los demás siguen peleando. Mientras la chica intenta calmarlos, yo intento recordar qué sé de Pereda. Sé que tiene una calle en Málaga cerca de la Heladería Lauri, sé que al final de la calle estaba la Pizzería Paperino que tanto me gustaba. Mientras los veo pelear, pienso que esos datos no vana ser suficientes para entretenerlos una hora. Una señora muy vieja me dice que, cuando termine con el mail de su amiga, le haga la Declaración de la Renta.