corbatas

domingo, 29 mayo 2022. Veo en la acera varias maletas amontonadas. En un portal están Francis, Elisa, Alberto y alguien más. Se supone que acaban de llegar de Nueva York y les han perdido las maletas. Les digo que están en la acera, que las vigilen. Entran en una tienda de trajes y corbatas tipo inglesa. Están arriba con el dueño. Tropiezo con todo, desordeno unas corbatas que había en una mesa enorme. Todo está tapizado en color vino. Subo por fin al piso de arriba encaramándome por las cortinas hasta la balaustrada. El dueño parece un Truman Capote avejentado. Me hace bromas irónicas. Si no tuviera tanta pinta de gay pensaría que intenta ligar conmigo. Tomamos el té en un cuarto pequeño desordenado que contrasta con la majestuosidad de la tienda. Los oigo hablar, pero mi cabeza está en otro lugar. No sé qué hacemos allí, quiero irme.