hojas amarillas

domingo, 15 junio 2025. Estoy en la que fue mi casa en cale Salitre. Me asomo a la cristalera y veo a Francis, Cocó y Víctor. Francis se para justo debajo. Los tres miran hacia arriba y saludan. Justo detrás les crece un árbol frondoso de hojas amarillas.
+
Es de noche. Alberto y una chica muy gorda se abrazan sobre un muro. Alberto le dice a la chica que yo había dicho que cuando llevaba el pelo con canas le quedaba muy bien. La chica me da las gracias. Les digo que sigan a lo suyo. Se ríen. Le pego a Alberto con una zapatilla de cuadros (que no sé de dónde ha salido). Se ríen más fuerte. Me alejo llorando.
+
Alberto y yo salimos de calle Beatas hacia calle Granada. Hay muchos turistas y todos llevan niños. Pienso que me he dejado atrás al mío. Vuelvo sobre mis pasos, no lo veo, pienso que lo han secuestrado. Entro en un edificio muy antiguo a preguntar. Pienso que quizá el portero lo tenga escondido. El portero es Colombo. Cuando le cuento lo que ha pasado, se echa las manos a la cabeza. Pienso que es inocente. El pobre se lleva tal mal rato que le digo que el niño no era mío, que no hay niño.